San Pellegrino, un agua con sabor

San Pellegrino es un agua vinculada con la alta gastronomía, muy apreciada por reputados chefs. Ellos la tienen en cuenta acompañando a sus grandes creaciones, junto a los grandes vinos. l Porque San Pellegrino es un  agua con sabor, algo que perciben los paladares y olfatos más refinados. 

Este agua es muy apreciada por sus burbujas y personalidad, libres de interferencias. Es moderadamente ácida y con un final muy mineral, regusto muy grato. 

Cómo catar un agua como San Pellegrino, con gas o sin él

Los especialistas coinciden en señalar la importancia del vaso para apreciar un agua de calidad, sea con gas o sin gas. Deberá ser de estas características: 

  • De boca estrella para el agua sin gas, es preferible un vaso de boca ancha.
  • Para el agua con gas como San Pellegrino, se empleará un vaso de boca estrecha.
  • El vaso siempre debe de ser de cristal, lo que facilitará apreciar más las aromas.
  • La limpieza del vaso se realizará con agua tibia y vinagre, sin emplear jabón u otros detergentes.
  • La temperatura más adecuada para servir el agua será de 10 a 12 grados.

La Asociación Internacional de Sumilleres S. Pellegrino y Aqua Panna dan pautas  para tomar  el agua

1.- La frescura: será lo  primero en percibirse al servir al agua, y lo haremos tomando solamente un sorbo.

2.- El análisis visual: debe realizarse de forma horizontal y vertical, desde arriba. Esto permitirá localizar posibles partículas o colores indeseados. El  agua siempre debe mostrar un aspecto brillante y transparente.

3.- El olfato: inspirar varias veces profundamente con los ojos cerrados, para  captar sensaciones olfativas. Un agua de calidad nunca debe oler a tierra, cal, o hierro.  

4.- El gusto: dejaremos reposar el sorbo de  agua en la lengua, dejándolo circular por toda la boca. Antes de tragarlo, lo llevaremos a la parte trasera de la boca.